Sr. Director: ¡Necesitamos que nuestras plazas se llenen de familias este 10 de diciembre!!

 

Sucede que ese día, en esta oportunidad, se ha convertido en una especie de año nuevo, un año nuevo prometedor, un año nuevo lleno de esperanzas.

 

La nueva administración elegida por una marcada mayoría de ciudadanos, necesita de nuestro apoyo en las calles. La nueva administración necesita que se note que somos muchos los que anhelamos un profundo cambio. Necesitamos que el mundo vea que somos las familias argentinas, los trabajadores, las personas de a pie, las que deseamos sin odio, pero con convicción, un cambio radical en la administración política del país, para poder recuperar la paz luego de muchos nuevos años de esfuerzos, esa paz que traerá justicia y prosperidad.

 

¿Sabes que es lo que anhelamos con pasión y esperanza?

 

Te lo cuento en un breve resumen: Vivir en paz, con una justicia que accione con fuerza, legalidad extrema y decisión, en contra de todo tipo de delito.

 

Vivir en paz, con fuerzas de seguridad profesionalizadas, que, odiando el delito entre sus filas, tengan la fuerte convicción y vocación para proteger a sus conciudadanos y los bienes de la nación toda.

 

Vivir en paz, logrando reinsertar en actividades de trabajo genuino a todas las personas que hasta hoy han vivido como integrantes de organizaciones estatales o civiles (mantenidas por el estado), que ya no tienen cabida en un país fundido que emprende el camino de la lógica, de la austeridad, y de la oposición al clientelismo político. Hoy son cientos los organismos que están sobrecargados de personal innecesario, como son cientos los organismos político partidarios que, generando un gran gasto, solo llevan a cabo acciones de poca practicidad y beneficio, cargadas, eso sí, de gran simulación.

 

No se puede. Ya no se puede malgastar nuestro dinero, mejor dicho, un dinero que ni siquiera tenemos. ¿No nos damos cuenta que estamos manteniendo a cientos de organizaciones partidarias camufladas como ONG destinadas al bien común, mientras nuestros jubilados casi no comen y la mayoría de nuestros niños viven bajo la pobreza?

 

¿Podemos entonces pensar que debemos mantener a una empresa estatal como Aerolíneas Argentinas, la cual genera una pérdida anual de más de 530 millones de dólares que pagamos con nuestros impuestos o con la interminable toma de deuda externa o interna, o con una parte del haber que nuestros jubilados no reciben?

 

Sé que son muchas las personas y familias que se verán afectadas por la impostergable racionalización del Estado; pero no queda otra; o comenzamos la tarea de orden y racionalidad, o derrapamos inevitablemente por el camino de la hiperinflación y consecuente pobreza masiva. Yo sé que la mayoría de los empleados que el Estado sostiene hoy dentro de sus infladas estructuras son gente capaz, preparada y competente. Fíjense en detalle a los integrantes de La Campora. ¡Allí hay mucha gente capaz, que se ha dejado atrapar por el Estado! ¡Cuántos de ellos podrían ser cuentapropistas, armar sus Pymes, u ocupar destacados puestos en Empresas de primera línea! Todos debemos aceptar que, en forma progresiva, el estado debe tender a contraerse, y dedicarse a su limitado ámbito de acción.

 

Queremos vivir en paz, sabiendo que contamos con FF.AA. equipadas e instruidas para defender nuestra soberanía y libertad. Queremos que se termine el negocio de la guerra de los 70 en donde unos están presos “a como dé”, y otros indemnizados y con cargos…” a como dé” también.

 

¡Queremos vivir en paz, no teniendo que estar mirando día a día con que nuevo alocado contenido escolar se busca adoctrinar o pervertir a nuestros hijos!

 

Queremos que dejen nacer a nuestros niños argentinos, y que la situación generada por un nuevo Estado, austero y decente, permita a las familias argentinas alimentar y educar a sus hijos. En un país con semejante potencial y con mucho territorio vacío, año a año son más los argentinos que mueren que los que logran nacer. Por favor, no podremos vivir en paz si continuamos matando a nuestros niños en gestación.

 

Les proponemos sumarse al esfuerzo, les proponemos tomen un moderado tiempo de cooperación y espera. Piensen que ha sido mucho el tiempo que han tenido Uds. para gobernar, y si somos sinceros….podemos decir que no han logrado más que un marcado retroceso en cualquier ámbito que deseen examinar.

 

Les proponemos un tiempo de unión, trabajo y paz.

 

Sé que a los peores de sus grupos no les conviene, que ellos recomendaran 24 toneladas de piedras y más adelante buscaran generar varios muertos. No los sigan, esa receta solo busca mantener impunidad para sus actos y preservar sus ocultas riquezas mal habidas.

 

Ellos proponen violencia…nosotros proponemos paz, trabajo y un primer abrazo.

 

FABIAN SOTELO

 

13.839.579

 

Publicado en www.laprensa.com.ar