Hoy, seis años después de aquel día, ráfagas de optimismo recorren la patria hasta ayer doliente. Una esperanza renovada – cuando parecía que, con el poeta citado, sólo quedaba mirar ”los muros de la patria mía, si un tiempo fuertes, ya desmoronados” – ha empezado a notarse en el semblante de familiares, amigos y prisioneros del régimen. Pero esto no quiere decir que la tarea esté cumplida ni que haya llegado para nosotros la hora del reposo.

 

 Desde el día de nuestra fundación sabíamos que nuestro objetivo estaba bastante más allá de unos juicios inicuos, instrumentados para consumar un infame propósito de venganza. En rigor, no ignorábamos que se trataba de algo aún más grave: la utilización de las leyes y del sistema judicial como un arma para destruir los principios más básicos del orden jurídico, a fin de sustituirlos por otros, trazados por una ideología siniestra.

 

 No se precisa un gran esfuerzo dialéctico para demostrarlo. ¿Puede ignorarse acaso la bien llamada colonización ideológica que se ha hecho del Poder Judicial, con la aparición inédita de sectas políticas integradas por jueces y funcionarios? ¿O la transformación de tribunales y hasta de la mismísima Procuración General en unidades de militancia? ¿O la manipulación de los derechos humanos, para que sirvan solamente para hacer imposible la lucha contra el terrorismo? ¿O la sanción de leyes y la implementación de políticas incompatibles con las virtudes fundamentales del orden republicano, la justicia y la sana economía?

 

 

La lista es muy extensa, pero, salvo estupidez o mala fe, imposible de ignorar. Mucho menos por nosotros, abogados que, seis años atrás, resolvimos hacer frente a estos atropellos y amenazas. Y ahora, cuando se insinúa la posibilidad de reconstruir lo que fue tan ostensible y gravemente dañado, nos parece que es nuestro deber renovar aquel compromiso.

 

Creemos pues que nuestra Asociación tiene mucho que aportar en estos momentos, a fin de evitar que la llama de esperanza que se ha encendido no se consuma en un torpe e infantil triunfalismo o – peor todavía – sea apagada por quienes diariamente nos están diciendo que de confirmarse su derrota no abandonarán el proyecto destructivo y sembrador de discordia que siguen reivindicando.

 

Y es por eso que, yendo más allá de las formalidades legales, queremos invitar a todos nuestros socios a asistir unánimemente a esta asamblea, a fin que, luego de despachar aquellos asuntos, entremos en un diálogo acerca de cuál será nuestra contribución.

 

 

Ø      Pretendemos que la cuestión se trate desde una perspectiva fáctica, para no quedar encerrados en un marco puramente teórico, obstructivo de la búsqueda de soluciones a problemas que no quedaron automáticamente resueltos con la última elección.

Ø     Debemos reorganizarnos, lo que es fundamental para incorporar nuevos socios y adherentes y desarrollar un vasto movimiento de información y divulgación, sobre todo entre quienes tendrán poder de decisión.

Ø     Habrá que empeñar esfuerzos considerables para derogar y reemplazar la legalidad desprovista de legitimidad que angosta y asfixia a la patria y que, además, ha corrompido a personas e instituciones en un grado que jamás se había visto ni siquiera imaginado.

 

 

Para contribuir al esclarecimiento de la situación y ayudarnos en la reflexión, previo a la deliberación que queremos provocar harán uso de la palabra los Dres. Jorge Vanossi, Alberto Rodríguez Varela y Ricardo Saint Jean.

 

La Asociación necesita de usted, consocio y amigo. Únase a los integrantes de la Comisión Directiva, los miembros de la mesa chica, los adherentes, colaboradores y amigos, para contagiar a todos su optimismo. Y para que, renovando su compromiso, se integre en esta nueva etapa, colaborando con su inteligencia y su trabajo a evitarnos – y evitarse – una frustración más.

 

Lo esperamos, entonces, el martes 10, a las 18.30, en el Hotel Lafayette, Reconquista 546.

 

LE ROGAMOS CONFIRMAR SU ASISTENCIA POR ESTE MISMO MEDIO A LA MAYOR BREVEDAD, A FIN DE PREVER CON SUFICIENTE ANTICIPACIÓN EL NÚMERO DE EMPANADAS Y LAS BEBIDAS QUE HABRÁN DE SERVIRSE DESPUÉS DE LA ASAMBLEA.

 

Saludamos a usted muy cordialmente.

 

 

                   Mariano Gradín                                                                    Alberto Solanet

                       Secretario                                                                            Presidente