La crisis desatada en la Prefectura Naval a partir de una abrupta reducción de los salarios para el personal subalterno de esta institución, se extendió en la mañana del miércoles (03 oct 2012) a los cuadros de la Gendarmeria Nacional cuyos efectivos también decidieron plegarse a la protesta. En la Escuela de Suboficiales, en Jesús María, unos 600 efectivos ganaron la ruta luego de la formación de la mañana y se dirigieron a la plaza principal de esa ciudad cordobesa concentrándose frente al monumento al general San Martín.  En la noche hubo forcejeos y escaramuzas entre prefecturianos y funcionarios del Gobierno en el edificio Guardacostas.

Los gendarmes imitaron a sus colegas prefecturianos y se instalaron en el edificio Centinela, asiento del comando de la fuerza de la misma manera como los primeros lo hicieron en el edificio Guardacostas. Los reclamos guardan similitud y reconocen un comun denominador: las podas de hasta un 60% en algunos haberes como consecuencia de la aplicación de nuevas normativas del Ministerio de Seguridad consideradas inconstitucionales por los afectados. 
Tanto gendarmes como prefecturianos dejaron en claro que el reclamo es estrictamente salarial como consecuencia de la poda inconsulta de sus sueldos, al serles suprimidos suplementos específicos que formaban parte de su haber y rechazaron cualquier connotación política que se les quiere dar desde medios de difusión progubernamentales. Advirtieron también, específicamente en el caso de Gendarmería, que recibieron veladas insinuaciones de que serían castigados y trasladados a otras dependencias del interior si continuaban con la protesta.
 
Con el correr del dia miércoles se constató que practicamente todas las unidades tanto de Prefectura como Gendarmería se hallaban en estado deliberativo a lo largo y a lo ancho del país.