Una crisis institucional se desató tras el relevo, por parte del jefe de Policía, Mercedes Soria, de cinco instructores de la escuela de cadetes de la Policía de Catamarca. Los oficiales se habían solidarizado con un reclamo de los padres de los estudiantes, señalando graves deficiencias en el establecimiento de formación educativa policial. Soria entendió tal actitud como un ataque a su investidura y ahora, el abogado de dos de los sancionados, pide su destitución.


El episodio no guarda precedentes en el historial reciente de la policía catamarqueña y se produce en el marco del recambio de autoridades gubernamentales tras los recientes comicios provinciales.


Según comentó el diario La Unión en su página digital, El Jefe de Policía, Mercedes Soria, pasó a disponibilidad a los cinco oficiales instructores que acompañaron los reclamos de los padres que hicieron semanas atrás en la escuela de Cadetes. En ese momento, los policías hicieron público en el estado desastroso que se vivía en la escuela.

El diario agregó que en la mañana de este viernes (27-05-2010)  fueron cesanteados los policías (otras versiones reducen a tres el número de castigados), por lo que el representante legal de dos de ellos, Hugo Chaile y Claudio Barrios, pedirá en la Legislatura la destitución de Soria.