Palabras especiales a Leandro Leupichun, un gaucho del puesto La Verdadera Argentina (nombre memorable) que se encuentra aislado con sus doce perros. El propietario de la estancia, Enrique Ibáñez, no consigue convencerlo de que evacúe, ”ya que no quiere abandonar a sus perros”. Coraje y amor verdadero por la patria.
Entre tanta corrupción, políticos mendaces, organizaciones sociales con merenderos que no existen, gerentes de la pobreza que castigan con su corrupción al pobre que deberían defender, pongámonos de pie, derramemos una lágrima de emoción y aplaudamos a aquellos que solo cumplen su deber con entrega y patriotismo, sean puesteros, soldados, coroneles, cuyo único objetivo es servir y ayudar al prójimo con valentía y desinterés. Allí descubrimos que somos todos argentinos y estamos mancomunados.
La Argentina tiene futuro cuando leemos estas historias. Viva la patria.
Gustavo Somaruga
DNI 11.889.645