por Rosendo Fraga (*)
El resultado rotundo del plebiscito de la reforma constitucional en Chile abre escenarios de incertidumbre política. El 78% votó por el Sí a la reforma de la constitución vigente, sancionada en 1980 por el régimen de Pinochet. Ello tiene lugar un año después de que el 18 de octubre de 2019 estallaran las protestas violentas que conmovieron al país. El resultado implica que la coalición social y política de la derecha, representada por el presidente Sebastián Piñera, se ha fracturado. Algunos sectores votaron por el No y otros lo hicieron por el Sí. Ello muestra que las protestas y el plebiscito están rediseñando el mapa político chileno.