Carta de lectores publicado en www.lanacion.com.ar Tras casi un año de propuestas para convertirlo en museo, propuestas que no fueron más allá de ideas inflamadas de patriotismo, pero sin ninguna acción concreta ni un proyecto por parte de la sociedad, nuestro querido aviso ARA Sobral ha tenido por fin, con su hundimiento, un digno final.
Estará en el lugar al que pertenece, en el mar, y no abandonado a su suerte en un muelle. En cada buque de la Armada que pase por el lugar donde se encuentra, su tripulación le rendirá los honores que fija el ceremonial naval. En tierra, en el Museo Naval de la Nación se exhibe su puente de mando, destruido por los misiles enemigos, dando cuenta del valor y determinación de su comandante, nuestro compañero Sergio Gómez Roca, y sus tripulantes que cayeron en cumplimiento de su misión solidaria. Ese puente es lo que tiene valor patrimonial a preservar; allí se puede apreciar el valor de la gesta. Visítenlo. También en la Escuela Naval Militar se recuerda su gloriosa acción a través del Premio Capitán Gómez Roca, que nuestra promoción otorga cada año al nuevo abanderado.
Carlos Alberto Zavalla
Capitán de Navío (RE)
Pte. Promoción 90 ESNM