República Argentina: 6:25:38pm

Publicado por www.edicionnacional.com.ar

Entre tantas cosas que atesora Ramón Anselmo Franco, oriundo de San José, se destaca una bandera argentina que utilizó a modo de chiripá debajo del uniforme para poder sacarla de las Islas y evitar que se la queden los ingleses.

Después de años de recolectar elementos que lo conectan y hacen recordar a sus entrañables Islas Malvinas, el excombatiente Ramón Anselmo Franco inaugurará el Museo Personal que estará emplazado en el barrio 30 Viviendas, de San José. La fecha elegida es el 3 de octubre a las 16, y reunirá a vecinos, amigos y camaradas que llegarán desde distintos puntos de la provincia y del país.

“Hace un tiempo venía pensando en este proyecto porque atesoraba muchas cosas. Decidí mostrarlas a la gente: mi historia, la que conservé durante tantos años”, manifestó mientras ultimaba detalles.

Entre las piezas más valiosas conserva: las cartas de su madre Delicia Espinoza, las misivas de un soldado, las marmitas, antiparras, bufanda y pasamontaña usados en las Islas. También exhibirá diplomas, fotografías, homenajes con Los de Imaguaré, el padre Julián Zini, Guillermo Novellis, Edgar Volcán y Rubén “Rulo” Grabovieski, además de imágenes de sus acciones solidarias junto a comunidades guaraníes.

En el Museo se expondrán maniquíes con uniformes de gala de la Armada Argentina, revistas, cuadros, un fusil de hierro réplica del FAL, una réplica en madera, cajas de municiones y misiles, recortes de diarios y el libro “La otra batalla después de Malvinas”, cuyo autor prometió asistir. También participarán cuatro misioneros del Batallón 3 de Infantería de Marina “Almirante Eleazar Videla”, veteranos de Misiones y de Capital Federal, la Banda del Regimiento de Monte 30 y una delegación del Liceo Naval Militar “Almirante Storni”.

Pero lo más valioso será una bandera argentina “que traje envuelta como chiripá debajo del overol para evitar que los enemigos la tomaran como trofeo”.

INVITADOS A URUGUAY. Franco posó junto al expresidente Luis Lacalle Pou tras el desfile, al conmemorarse 214 años del Grito de Asencio, ocurrido el 28 de febrero de 1811 en los Campos de Asencio, departamento de Soriano.

Un largo proceso

La idea es “tratar de contar y compartir con la sociedad. Es una forma de hacer terapia. Mientras estoy con los preparativos, me siento bien”, dijo Franco, que acondicionó un sector de la Casa B4 del barrio 30 Viviendas para montar este proyecto que tenía pendiente desde hace años.

Su familia —su esposa Lidia y sus hijos Nicolás, Cintia, Jesica, María Luisa, Sergio y Ramón Anselmo— “está contenta, conforme y me apoya”, aseguró quien fue a Malvinas con apenas 19 años y hoy es el único veterano de San José, ya que Carlos Alberto Villalba falleció en un accidente.

Al regresar, recordó: “Parecía que llegó mi cuerpo, no yo, porque era un llanterío solo… volvimos con 19 años, pero nuestra mente era de 30 o 40. Nos hicieron madurar de golpe, con problemas de la posguerra: las pesadillas, el retumbar de cañones, el bajón. Con el tiempo fui sanando, aunque la procesión va por dentro”.

En ese entonces, “había un amor a la Patria que hacía que no nos tiráramos para atrás. Nos tocó ir y lo vimos como algo bueno. Hoy nos sentimos más patriotas que todos”, aseguró.