El presidente Mauricio Macri reiteró en la mañana del sábado (14 abril) su condena al uso de armas químicas, pero al mismo tiempo hizo un llamado a la comunidad internacional “para hacer esfuerzos que permitan preservar la paz y la seguridad, evitando acciones que generen una escalada de tensión”. Sus palabras fueron interpretadas como una sutil toma de distancia de los bombardeos a Siria hechos horas antes por Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia