República Argentina: 11:09:30am

Antecedentes

Acompañado por el ministro de Defensa, Jorge Taiana, y la cúpula del Estado Mayor Conjunto, Alberto Fernández agrego, entre otras que: “Vi la capacidad de movilización y acción que tienen las Fuerzas Armadas, y todos los argentinos y argentinas debemos estar agradecidos por lo que hicieron en un momento en que teníamos que enfrentar una guerra singular, una guerra contra un virus”, destacó.

 También indicó también que su objetivo al asumir el cargo fue que las tres fuerzas “vuelvan a ser una institución atendida por el Estado” y repasó las medidas que se tomaron para “regularizar cosas que estuvieron mal durante muchos años”. (Cosa que es cierto, medida adoptada por este gobierno ante la alta litigiosidad y fallos adversos de la Justicia).

 

En el acto por el Día del Ejercito 

Jorge Taiana ponderó la labor militar en la asistencia a la comunidad durante la pandemia, pero eludió referirse la enojosa situación por el desajuste salarial con relación a las FF.SS. al  encabezar el acto central por el 212 aniversario de la creación del Ejército Argentino, en el Colegio Militar de la Nación. La fuerza "tiene un presente destacado y un futuro con importantes desafíos que cumplir al servicio de la patria y la sociedad", aseguró. Sin embargo, a diferencia de su discurso en el Día de la Armada cuando específicamente señaló la necesidad de corregir el desfasaje de haberes entre policías y militares eludió puntualmente referirse a esa enojosa situación. 

Taiana, agradeció la labor de los efectivos del Ejército en todo el país durante la pandemia de coronavirus y dijo que esa tarea "permitió que salieran de los muros de los regimientos y tuvieran contacto más estrecho con el pueblo".

También, resaltó el "desempeño del personal del Ejército en las operaciones Belgrano 1 y 2, donde la fuerza empeñó todos sus recursos en la lucha contra el coronavirus desplegados en distintas tareas de apoyo".

Mencionó especialmente la "inédita instalación de dos hospitales de campaña y las acciones de apoyo a la comunidad que permitieron que la sociedad visibilice la importancia de la labor que cumple hoy el Ejército".

 

 

Aumento salarial para las Fuerzas

En las  FF.AA. 

El Gobierno otorgó a partir del 1 de marzo un aumento del Haber Mensual para el personal de las Fuerzas Armadas y de Seguridad mediante el dictado de la Resolución Conjunta Nro 1/2022 RESFC2022-1-APN-MEC firmada por el entonces  ministro de Economía Martín Guzmán y de Defensa Jorge  Taiana. Este incremento beneficio a activos, retirados y pensionistas a la vez que fortaleció al IOSFA (Instituto Obra Social de las FF.AA.)  y sirvió  para  la capitalización del Instituto de Ayuda Financiera para Pago de Retiros y Pensiones Militares (IAFPRPM).

El nuevo  Haber mensual a partir del 1 de marzo fue el siguiente (solo se consigna como ejemplo las primeras jerarquías): “Teniente General, Almirante, Brigadier General 225.548 General de División, Vicealmirante, Brigadier Mayor 201.139; General de Brigada, Contraalmirante, Brigadier 183.258…

 

En las FF.SS.

El aumento para las Fuerzas de Seguridad fue otorgado mediante la Resolución del Ministerio de Seguridad Nro 116/2022 (Resol2022-1116APN MS6) que contiene varios anexos, según las Fuerzas. 

A efectos ilustrativos solo se publica el anexo 1 con el haber mensual para el Personal de Gendarmería Nacional (solo algunas jerarquías):

“COMANDANTE GENERAL 216.651,45;  COMANDANTE MAYOR 187.704,59; COMANDANTE PRINCIPAL 160.434,20

COMANDANTE 136.872,10; SEGUNDO COMANDANTE 117.816,13

En otro anexo se publica los Suplementos Particulares: DISPONIBILIDAD PERMANENTE PARA EL CARGO, POR MAYOR EXIGENCIAS DEL SERVICIO, DISPONIBILIDAD PERMANETE PARA EL CARGO Y DISPONIBILIDAD PERMANETE PARA LA FUNCION que percibe solo el personal en actividad y de acuerdo al grado. En Prefectura y gendarmería reciben idéntica denominación y distinto a la de Policía Federal y al de la Policía de Seguridad Aeroportuaria. 

 En el mismo mes de marzo el Gobierno incrementó el haber de las cuatro fuerzas de seguridad federales, anuló suplementos particulares y creo una compensación. Lo hizo por decreto 0142  APN- PTE de fecha 22 de marzo, publicado en el Boletín Oficial el 23 del mismo mes, en donde fija,  a partir del 1° de abril de 2022, el nuevo haber mensual para el personal en actividad  de Gendarmería Nacional, Prefectura Naval Argentina, Policía Federal Argentina y Policía de Seguridad Aeroportuaria.  En los Considerandos del decreto, el Gobierno afirma que el personal de las Fuerzas citadas en el párrafo anterior, “…percibe, en diversas proporciones, sumas remunerativas y no bonificables y/o sumas no remunerativas y no bonificables entre sus haberes”.

También, que  la existencia de sumas con estas características se ha mantenido de manera continua, bajo distintas modalidades y conceptos, desde hace más de VEINTICINCO  años, que trajo como consecuencia la afectación de los recursos destinado a las obras sociales y al sistema previsional, provocaron la distorsión de la escala salarial y provocaron un alto grado de litigiosidad.

El Decreto crea una “COMPENSACION”

La norma dictada establece, en el ámbito de las citadas Fuerzas Policiales y de Seguridad Federales, una compensación por ”Recargo de Servicio”, destinada al personal en actividad que cumpla con una jornada extraordinaria de labor diaria.

Mediante el ARTÍCULO 5° crea para la Prefectura Naval y para la Gendarmería Nacional  la compensación por “Recargo de Servicio” que será percibida por aquellos que cumplan servicios extraordinarios fuera del horario normal y habitual de labor, debiendo procederse a su liquidación cuando los mismos excedan las TRES (3) horas diarias. Cuando dicho recargo demande un mayor esfuerzo psicofísico y el mismo exceda las CINCO (5) horas diarias de la jornada antedicha, se liquidará el importe resultante de lo dispuesto precedentemente con más un plus del CIEN POR CIENTO (100 %) de dicho valor. La percepción de la presente compensación no excluye el derecho a la compensación por gastos de comida y/o racionamiento.

 

Que fue derogado

Fueron derogados para la Prefectura y la Gendarmería,  los suplementos particulares “por Cumplimiento de Tareas Específicas de Seguridad” y “por Mayor Exigencia del Servicio”, “Disponibilidad Permanente para el Cargo” o por “Disponibilidad Permanente para la Función”. 

Para la Policía Federal fueron derogados los suplementos particulares por “Función Policial Operativa”, por “Función Técnica de Apoyo” y por “Función de Investigaciones.

Para la policía de Seguridad Aeroportuaria  se derogaron los suplementos particulares  “Responsabilidad por Cargo o Función” Por Actividad Riesgosa” y “Por Exigencia del Servicio de Seguridad Aeroportuaria”.

Asimismo, el decreto  derogo, a partir del 1º de abril de 2022, la compensación prevista en los Decretos Nros. 1994 de fecha 28 de diciembre de 2006, 1163 de fecha 30 de agosto de 2007, 1653 de fecha 9 de octubre de 2008, 753 de fecha 18 de junio de 2009 y 2048 de fecha 15 de diciembre de 2009, modificados por el artículo 9° de la Resolución del MINISTERIO DE SEGURIDAD N° 312 de fecha 29 de junio de 2021 (situación a que alude el Presidente Fernández en el tercer párrafo de la esta nota).

Asimismo, los Decretos Nros. 1305/12, 1307/12, 142/12 y 243/15  dejaron sin efecto las mencionadas compensaciones respecto del personal retirado y pensionistas de las Fuerzas Armadas, organismos de Inteligencia de las Fuerzas Armadas, de las Fuerzas de Seguridad y del Personal del Servicio Penitenciario Federal, y quedaron en vigencia solamente para los retirados y los pensionistas de la POLICÍA FEDERAL ARGENTINA. Ahora,  suprime la compensación para el personal retirado y pensionado de la POLICÍA FEDERAL,-tal cual se lee en los Considerandos- de la norma, aunque para criterio de este periodista, no se refleja en el articulado del decreto (en ninguno de sus 20 artículos).

De implementarse esta medida, deja en igualdad de condiciones a todos los retirados y pensionistas de las Fuerzas Policiales y de Seguridad Federales.

 Consecuencias para el futuro

Esta nueva norma, afectara en el futuro a  todos aquellos que tengan una demanda contra el Estado por reclamo de pago de estos suplementos particulares y aun no cuenten con sentencia definitiva. O dicho de otra manera, si la sentencia definitiva se produce después del 1 de abril de 2022, todo el tiempo posterior a esta fecha, no se contabilizara para el pago del retroactivo, ya que en esta fecha el Gobierno derogo los “cuestionados” suplementos particulares.

En síntesis, con estas normas se derogaron los suplementos particulares y crearon una “compensación” por mayor cantidad de  horas trabajadas. 

Una fuente consultada por TIEMPO MILITAR sostiene; “… lo que seguramente podría pasar es que en las Fuerzas la mayoría cobrara esta compensación, al desaparecer los suplementos particulares, y para la Justicia en el futuro esta compensación (particular ya que solo los activos perciben), se convertirá en una compensación general (no lo cobran unos pocos, sino lo cobra la mayoría) y ya hay jurisprudencia  de la CSJN sobre esta cuestión-cuando es general y cuando es particular). Inexorablemente hay que pensar que generara nuevos juicios por reclamos del cobro… Indudablemente no cambiaron los políticos en estos últimos veinte años, vuelven a aplicar la misma fórmula que tiene errores ya comprobados. La situación no cambio. Seguramente generara nuevos juicios.”  

Nuevos Haberes de Prefectura y Gendarmería  a partir 1 de abril (Anexo I y II)

Cte Grl- PG  244.332; Cte My- PM 212.463, Cte Ppal -PP 182.227; Cte-PR 156.079; 2do. Cte- Sp 136.367…(solo se publica algunas jerarquías como ejemplo).

 

 

Compensación por Recargo de Servicio a partir 1 de abril para Prefectura y Gendarmería (Anexo V)

COMANDANTE GENERAL-PG (de 3 a 5 horas) 3.084,43 (más de 5 horas) 6.168,86, COMANDANTE MAYOR-PM  2.826,86     5.653,73  COMANDANTE PRINCIPAL-PP  1.994,49            3.988,99 COMANDANTE-PR  1.705,55                           3.411,10 SEGUNDO COMANDANTE-SP  1.485,91   2.971,82

De la observación de los cuadros que anteceden, al comparar el contenido de los Anexos I; II ; IV con el Anexo II ,  queda en claro que  los haberes del personal de la Policía Federal son superiores al resto de las Fuerzas; es decir están percibiendo mejores remuneraciones que las tres restantes Fuerzas. Una fuente dijo a TIEMPO MILITAR: “…comparando los haberes que percibimos en las Fuerzas de Seguridad, el de la Policía Federal, no se condice con el principio “a similar trabajo similar remuneración”. Si en Prefectura o Gendarmería cobramos siete, en la Policía Federal cobran 10… ¿Porque qué?”

En ambientes de las Fuerzas se comenta que esta situación de inequidad salarial ya habría sido planteada por las conducciones de las Fuerzas al Ministro y sería motivo de un próximo análisis. 

Posteriormente, esta situación fue solucionado por el Ministerio de Seguridad que igualo el haber de todas las FF.SS. 

 

Reclamos al Gobierno

Primer pedido de la UPMAC al Comandante en Jefe de las FF.AA: 

En mayo, la UPMAC (Unión del Personal Militar Asociación Civil, que preside el Coronel (R) Francisco Ricardo Verna y que tiene como vicepresidente 1ro al CN VGM (R) Emilio Horario Giménez, vicepresidente 2do el Comodoro (R) Jorge Alfredo Sarli y secretario al Suboficial Mayor FAA (R) Miguel Ángel Artuso se dirigió por nota al Comandante en Jefe de las FF.AA. y Presidente de la Nación  preocupados por la desvalorización de los haberes militares y la jerarquización de la profesión militar.

El pedido a Fernández dice, entre otras cuestiones:  “…Que resulta necesario fijar una nueva escala de haberes para el personal militar de las Fuerzas Armadas y para la Policía de Establecimientos Navales, que reconozca una adecuada jerarquización con relación a la capacidad, responsabilidad y dedicación que demanda la correcta ejecución de su actividad”. 

Dicho texto, nos obliga a plantear lo siguiente:  1º- Una adecuada jerarquización hubiese tenido lugar si se hubiera aplicado la Ley 19.101 y su Reglamentación, modificada por el Decreto 1081 de septiembre de 2005, firmado por Usted cuando era Jefe de Gabinete de Ministros. Dicha norma rezaba: “Art. 3° - Fíjase, en consonancia con lo dispuesto en los artículos anteriores, el 'Haber Mensual' para el Personal Militar de las FUERZAS ARMADAS” conforme a los importes que, para las distintas jerarquías, se detallan .., etc, etc”. 

La escala de haberes allí establecida era la resultante de aplicar un Coeficiente Jerárquico de 5,33 a 1 (Teniente General – Voluntario de Segunda), que permaneció vigente durante muchos años. En cambio, el que se ha utilizado para construir la escala obrante en Anexo 1 de la citada Resolución Conjunta, es de 4,6 a 1; el mismo aplicado a la Resolución Conjunta N° 1/2022 del 25 de febrero de 2022. 

Es evidente que el “considerando” confunde el concepto de “jerarquización” con el de “aumento de salario para compensar los efectos de la inflación”. La escala de haberes anexa a la Resolución de marras, incluye un aumento en el Código 1 (Sueldo), pero no aplica nuevos Coeficientes Jerárquicos, sino que los mantiene en la misma relación que el período anterior, muy por debajo de los valores incluidos en el Decreto referido. Ello demuestra que no se ha hecho una “adecuada jerarquización”. 

2º- Como ya se ha dicho, la mencionada Resolución Conjunta solo ha instrumentado una mera corrección del haber militar por efecto inflacionario, profundizando, por lo exigua, la falta de equiparación de los haberes de las Fuerzas Armadas con los de las Fuerzas de Seguridad. 

 

El diario La Nación editorializo el reclamo de la UPMAC por el retraso de los haberes militares

El Editorial del diario La Nación afirma entre otras cuestiones que:” El 17 de mayo, en ocasión del Día de la Armada, el ministro de Defensa, Jorge Taiana, anunció en Puerto Belgrano que los salarios de las Fuerzas Armadas (Ejército, Armada y Fuerza Aérea) se equipararán con los de las fuerzas de seguridad federales (Gendarmería, Prefectura, Policía Federal y Policía de Seguridad Aeronáutica).

Hasta 1983, los salarios militares se asimilaban en los distintos niveles con los del Poder Judicial. A partir del restablecimiento de la democracia, dejó de ser así e implicó una significativa caída de los ingresos del personal de las Fuerzas Armadas.

En términos comparativos, en ningún país el salario militar está por debajo del de las fuerzas de seguridad. En promedio cobran entre un 15% y un 20% más. En la Argentina, los salarios en las fuerzas armadas son sustancialmente menores a los de las fuerzas de seguridad, lo cual impacta sobre su obra social, Iosfa, y desfinancia el Instituto de Ayuda Financiera para el Pago de Retiros y Pensiones Militares (IAF).

Los seis grados de suboficiales no llegan a cobrar un salario que cubra la canasta básica que determina la línea de pobreza, al igual que los tres primeros grados de los oficiales….”.

 

 Un documento interno, que circula en los cuadros de las FFAA desnuda el descontento por el grave desbalance entre los haberes castrenses con los de las fuerzas policiales federales

El documento dice textualmente: 

Con fecha 15 de mayo se le hizo llegar al Presidente un reclamo por la desactualización de los haberes del Personal Militar, el cual, a la fecha, ha producido un tibio e ineficaz efecto. La postura castrense es apelar al Presidente, en su condición de Comandante en Jefe de la Fuerzas Armadas, como lo dice la Constitución, convencidos de que en la cultura militar todos lo pedidos deben encaminarse por la vía jerárquica.

Como el aspecto salarial excede las facultades de los Jefes de Estado Mayor de cada Fuerza, corresponde encaminar la queja ante el máximo responsable de la conducción de esas instituciones del Estado. Además, lo hacen en nombre de sus familias, destinatarios directos de sus ingresos y de los pensionados militares, colectivo que no tiene voz ni vía jerárquica.

En mayo el Poder Ejecutivo había dictado la Resolución Conjunta N°3/22 que motivó el aludido reclamo. Desde hace años en Decretos, y ahora en las llamadas Resoluciones Conjuntas (que son resoluciones ministeriales de Economía y Defensa en las que se formalizan los ajustes de sueldos) se vienen repitiendo los mismos textos. La pereza administrativa y/o el des concepto en la redacción de este tipo de resolución parece ser la norma porque, una vez más, en la recientemente dictada Resolución Conjunta N° 5/2022, se repite textualmente la misma falsedad relativa a una supuesta “adecuada jerarquización”. 

En realidad, no hay tal jerarquización. Solo se apela a un “recorte y pegue” de considerandos, mera reiteración mendaz de documentos anteriores, que no guarda relación con la parte dispositiva del documento. Ello demuestra la pertinaz determinación de no corregir el problema de fondo sino de publicar medidas con expresiones rimbombantes, a todas luces falaces, y continuar renovando las promesas largamente incumplidas.

Si no se modifican los coeficientes jerárquicos no existe jerarquización; ni adecuada ni insuficiente. Las distancias jerárquicas relativas, en lo que a sueldo se refiere, se mantienen. Es evidente que solo se persigue el cumplimiento circunstancial de una rutina burocrática “para ir tirando” antes que expresar, con fundamentos genuinos, la voluntad del Estado de resolver los problemas de los agentes alcanzados por la norma.

Total, los militares no hacen paros, ni piquetes y si levantan la voz se los sanciona y se les perjudica irremediablemente su carrera.

Debe tenerse en cuenta que, por la estructura escalafonaria castrense y su plan de carrera, la diferenciación salarial entre los grados contribuye a la valoración de los sucesivos ascensos que materializan la carrera militar durante el “servicio activo”. Además, constituye un incentivo complementario para alcanzar los méritos necesarios para obtener una promoción y ostentar una nuevo “grado militar”.  Y todos sueñan con alcanzar el grado máximo, con culminar su carrera. Para eso la iniciaron desde jóvenes, superaron una esforzada adaptación a la vida militar, desarrollan una capacitación continua y reconocen en el mérito el principal impulsor del progreso profesional.

En otro orden de ideas, la mencionada Resolución Conjunta lejos de dar respuesta al ya histórico atraso de las remuneraciones de las Fuerzas Armadas, solo ha instrumentado un mínimo aumento en cuotas, el que no llega a compensar los incrementos acumulados del IPC, en ninguna de sus versiones oficiales publicadas por el INDEC.

Finalmente, ingresando ya al segundo semestre del año, nada se ha dispuesto con relación a la equiparación de los haberes de las Fuerzas Armadas respecto de las Fuerzas de Seguridad, cuya brecha salarial a favor de éstas últimas, para jerarquías equivalentes, hoy supera el 70 % en ciertos casos y alcanza a un 65% de promedio.

Este injusto desequilibrio constituye un menoscabo de la profesión militar que afrenta a sus integrantes y compromete seriamente el presente y el futuro de las instituciones de la Defensa. Es grande la dificultad que afrontan las Fuerzas para retener a sus recursos humanos en los que el Estado invirtió cuantiosos recursos durante muchos años para proveer a su formación.

Por otra parte, los retrasos salariales producen una desfinanciación del Instituto de Ayuda Financiera para el Pago de Retiros y Pensiones Militares (IAF), deteriorando el sistema previsional militar y, como lógica consecuencia, también agrava significativamente la ya comprometida situación de la Obra Social de las Fuerzas Armadas, IOSFA, cuyos exiguos ingresos guardan relación porcentual directa con los de sus afiliados. 

Todo ello brinda un panorama por demás desalentador para los militares del presente y torna poco atractiva la carrera militar hacia el futuro, lo cual no es congruente con la declamada prioridad que el Gobierno dice asignar a las cuestiones de la Defensa Nacional. Sin capital humano debidamente formado y adiestrado no hay Defensa, por más que se incorporen medios por arte de magia. 

Los militares aspiran a que se les aplique efectivamente una escala de Coeficientes Jerárquicos como la que estuvo vigente durante muchos años, hace poco más de una década, que ha sido de 5,33 a 1 en lugar del 4,6 a 1 actualmente vigente. Esta es la única herramienta idónea para una “adecuada jerarquización”. Utilizar discursiva y engañosamente este argumento sin concretarlo insulta la inteligencia de cualquiera que lo analice.

Necesitan que se proceda de inmediato a la equiparación de sus haberes con los de las Fuerzas de Seguridad.

Requieren que se implemente un mecanismo de ajuste del “Sueldo Básico” que neutralice los efectos de la inflación para lo cual: se deben respetar, como mínimo, los índices de inflación producidos por el INDEC y producir los ajustes con una frecuencia tal que eviten un deterioro acumulativo del poder adquisitivo de la remuneración, porque esos deterioros nunca son compensados con pagos retroactivos.

Finalmente, para dar una solución definitiva a esta problemática debe adoptarse a la brevedad una nueva “Política Salarial” para las Fuerzas Armadas. Ello permitirá revertir la grave situación salarial actual y neutralizará, a mediano y largo plazo, y de manera automática, las alteraciones, manipulaciones e intromisiones que intentaren provocarse. 

No hacerlo afectará severamente, como sucede en este momento, uno de los pilares básicos del ejercicio de la profesión militar, como lo es la disciplina, basada esencialmente, en la confianza recíproca entre superiores y subalternos.

En este esquema no debe perderse de vista que en la cúspide de la pirámide militar se encuentra nada menos que el Presidente de la Nación, su Comandante en Jefe.

14 de Julio, 2022”.

 

 

 

 

Resoluciones falaces y promesas incumplidas . Severa carta del Presidente de la UPMAC al jefe del Estado por la crutica situación salarial que aflige a la comunidad militar.

 

 

Segundo reclamo de la UPMAC 

 

Fue con fecha de Julio y estuvo dirigido al  Presidente de la Nación y  Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas  Dr. Alberto Ángel FERNANDEZ, firmada por el presidente Coronel (R)  Francisco Ricardo Verna, cuyas partes principales reproducimos textualmente: “En mi carácter de Presidente de la Unión Personal Militar 

Asociación Civil, Personería Jurídica 00017/03, me dirijo a Usted, en su doble condición de Presidente de la Nación y Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, con motivo de la pertinaz determinación que demuestra el Poder Ejecutivo Nacional a no resolver el problema de los Haberes del Personal Militar. En su lugar se continúa emitiendo Resoluciones falaces y se recurre a promesas, varias veces incumplidas, lo que perjudica una vez más a nuestros representados: hombres, mujeres y familiares de las Fuerzas Armadas de la Nación. 

Señor Presidente, en primer lugar le informo que resulta una repetición mendaz la expresión “adecuada jerarquización”, utilizada en todas las resoluciones ministeriales, mientras no se restablezcan los coeficientes históricos de jerarquización, como mínimo la relación 5,35 a 1, entre el Teniente General y el Voluntario de 2ª. y grados equivalentes de la Armada y de la Fuerza Aérea. 

En segundo lugar, la Resolución Conjunta Nro. 5/2022, que fija la escala salarial en etapas, desde julio del corriente hasta marzo del 2023, no remedia el muy prolongado atraso de las remuneraciones de las FFAA sino que agrava el mismo, estableciendo un mínimo aumento, no acumulativo y en cuotas, que no llega a compensar los incrementos del IPC, en ninguna de sus versiones oficiales publicadas por el INDEC. 

En tercer lugar, ingresamos al segundo semestre del año 2022 sin que medie una disposición en relación a la equiparación de haberes de las Fuerzas Armadas respecto de los de las Fuerzas de Seguridad Nacionales, anunciada por Ud. señor Presidente, y por el Ministro de Defensa, públicamente y en reiteradas oportunidades y medios. Esta brecha se ha profundizado con el nuevo aumento otorgado a estas últimas, por Resolución Ministerial 420/2022, y hoy supera ampliamente la anterior del 60% entre grados equivalentes. Cabe aclarar que dicho aumento es un merecido reconocimiento a las FFSS por su digno accionar en sus funciones específicas, y resulta doblemente loable que reciban esta remuneración, aunque no dispongan de un Comandante en Jefe responsable de su conducción. 

Señor Presidente, la dolorosa e indigna situación expuesta ha generado en el sector de nuestros representados, descontento, rechazo, desconfianza y un grave malestar colectivo por las erróneas medidas dictadas y por el incumplimiento, por parte del Poder que Usted encabeza, de la palabra empeñada en lo referente a los haberes del personal militar y sus familias. Todo ello afecta y desalienta seriamente el presente y el futuro profesional de los hombres y mujeres de las FFAA, al negarles un salario digno y correspondiente a su preparación para la Defensa de la Patria y a la colaboración irrestricta que prestan al servicio de los habitantes de la Nación. 

 

Por todo lo expuesto, solicitamos nuevamente al señor Comandante en Jefe: 

1. Se aplique, como mínimo, la escala de coeficientes de jerarquización histórica, como única herramienta idónea para una “adecuada jerarquización”. 

2. Se implemente un mecanismo de Ajuste al concepto “Sueldo” que neutralice los efectos de la inflación, respetando, como mínimo, los índices del INDEC. 

3. Se proceda de inmediato a la Equiparación de los Haberes de las FFAA con el de las FFSS., cerrando la brecha acumulada y su proyección futura. 

4. Se instruya al Ministerio de Defensa para que, a la brevedad, establezca una “Política Salarial”, a disposición en nuestra Entidad, que permita revertir en el corto plazo la grave situación salarial actual y neutralice a mediano y largo plazo, y de manera automática, todo tipo de alteraciones, contradicciones e intromisiones que pudieren invocarse o provocarse, las que afectan severamente uno de los pilares básicos de la profesión militar, como lo es la disciplina basada en la confianza recíproca entre superiores y subalternos….” 

 

Los militares argentinos son los peores pagos de la región continental

Esta situación es reflejada en una nota publicada en el diario El Litoral (www.ellitoral.com ) firmada por el periodista  Bryan J. Mayer, cuyo contenido reproducimos las partes mas sustanciales:

 El ingreso de los Subtenientes, Guardiamarinas y Alférez están casi tres veces por debajo del promedio de ingresos del mismo escalafón en los países vecinos de la Argentina. La inflación, la extensión de las promesas y la destrucción de la profesión militar generan un malestar inédito en las FFAA.

 Mientras toda la familia militar espera ilusionada que el ministro de Defensa – Jorge Taiana – cumpla la promesa que hizo hace más de dos meses de equiparar los salarios militares con los de las Fuerzas de Seguridad, en El Litoral urgió indagar cómo se posicionan los ingresos castrenses argentinos respecto de los países que limitan con Argentina para entender si, quizá, los haberes están en un nivel razonable con la región.

Comparar lo que cobra un Segundo Teniente del Ejército de Estados Unidos sería injusto. Ese gobierno es uno de los que destina mayor PBI a su instrumento militar (alrededor de 4 puntos) en el mundo; contra el nuestro que destina diez veces menos, por debajo de un punto del Producto Bruto Interno argentino. Las realidades económicas financieras y del día a día también son demasiado abismales.…

Como parámetro normalizador, se considerará siempre el primer grado de oficiales de las Fuerzas Armadas y su conversión a dólares. Para arrancar, el haber básico de un Subteniente, Alférez o Guardiamarina argentino (según el aumento de julio y que cobrarán en agosto de 2022): es de 272 dólares. Es el peor entre todos los uniformados extranjeros consultados (y quedaría en el mismo puesto si el cálculo fuera considerando el valor oficial del dólar). 

El podio de haberes básicos lo encabeza Brasil, donde un Segundo Teniente percibe 7.000 reales, los que significan 1272 dólares (relación: 5.5/1). Es seguido por Chile, donde en el mismo grado reciben 1250 dólares (1.250.000 de pesos chilenos). El tercer lugar es para Uruguay: un Alférez del cuerpo comando cobra U$D 1.116 (47.947 pesos uruguayos con un dólar a 42,95). En cuarta posición de este ranking salarial quedan los militares bolivianos, con un haber básico de 880 dólares, es decir 6.093 pesos bolivianos. Finalmente, antes que Argentina, quedan los paraguayos con un recibo mensual de 780 dólares que es lo que valen los aproximadamente 5.300.000 de guaraníes paraguayos que perciben por sus servicios al servicio de su Patria.”

“…no solamente se concluye que los efectivos de la Armada Argentina, del Ejército Argentino y de la Fuerza Aérea están en la peor situación salarial de la región, sino que incluso están 2.8 veces por debajo del promedio y mil dólares en detrimento que un Segundo Teniente brasileño, el mejor pago en el mismo espectro consultado.

“…En la misma línea que el párrafo precedente, no es menor poner en foco el malestar existente entre los uniformados hacia las autoridades militares y políticas que dejaron rezagada la discusión de haberes a promesas aún inconclusas…, mientras la inflación acelerada licua el falso aumento del 60% (prorrateado hasta marzo 2023) y ven abrir una nueva unidad militar (en Catamarca), mientras el resto de la estructura está ya esquelética y sin los recursos suficientes para un funcionamiento normal y cotidiano de alistamiento y adiestramiento acorde a los desafíos del Siglo XXI. Hoy, pese a la activa participación cotidiana, la mayoría de quienes juran ofrendar sus vidas por sus compatriotas si fuese necesario, están por debajo de la línea de pobreza en Argentina”

 

 

El desequilibrio salarial entre las Fuerzas Armadas y las de Seguridad ya casi llega a casi el 70 por ciento.

 

Desde hace tiempo que las Fuerzas Armadas piden equiparar sus ingresos con los de las Gendarmería Nacional, la Prefectura Naval, la Policía Federal y la Policía de Seguridad Aeroportuaria y, aunque hubo una promesa de parte del Ministerio de Defensa de hacerlo, las resoluciones en donde el Ejecutivo fija la escala de haberes hasta marzo del 2023 muestra que en esta ocasión la brecha se mantendrá.

Según las últimas actualizaciones salariales publicadas en el Boletín Oficial, las fuerzas que dependen del Ministerio de Defensa están en clara desventaja desde lo económico respecto de las que lo hacen del Ministerio de Seguridad, con una diferencia salarial que llega hasta casi el 70% entre unos y otros. 

Un problema que esto genera no solo tiene que ver con la brecha salarial, sino con la capacidad de poder atraer y contener al capital humano de las Fuerzas Armadas frente a las posibilidades de las otras fuerzas.

En el entorno del ministro Taiana señalan que buscarán mejorar la situación de las Fuerzas Armadas para achicar la diferencia salarial que existe. El desequilibrio salarial entre las Fuerzas Armadas y las de Seguridad llega a casi el 70 por ciento.

 

Fuente: UPMAC

 

 

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